Zaqueo en la Biblia - El recaudador de impuestos arrepentido

Zaqueo era un hombre deshonesto cuya curiosidad le llevó a Jesucristo y a la salvación. Irónicamente, su nombre significa "puro" o "inocente" en hebreo.

Pequeño de estatura, Zaqueo tuvo que subirse a un árbol para ver pasar a Jesús. Para su asombro, el Señor llamó a Zaqueo por su nombre y le dijo que bajara del árbol. Ese mismo día, Jesús se fue a casa con Zaqueo. Conmovido por el mensaje de Jesús, el famoso pecador entregó su vida a Cristo y nunca volvió a ser el mismo.

Zaqueo, el recaudador de impuestos

• Conocido por Zaqueo era un recaudador de impuestos rico y corrupto que se subió a un sicómoro para ver a Jesús, a quien acogió en su casa y cuyo encuentro cambió su vida para siempre.

• Referencias bíblicas: La historia de Zaqueo sólo se encuentra en el Evangelio de Lucas 19:1-10.
• Ocupación : Zaqueo era el principal recaudador de impuestos de Jericó.
• Ciudad natal Zaqueo vivía en Jericó, un gran centro comercial situado en una importante ruta comercial entre Jerusalén y los territorios al este del Jordán.

La historia de Zaqueo en la Biblia

Como jefe de los recaudadores de impuestos de los alrededores de Jericó, Zaqueo, judío, era un empleado del Imperio Romano. En el sistema romano, los hombres pujaban por esos puestos, comprometiéndose a recaudar una cierta cantidad de dinero. Todo lo que recaudaban por encima de esa cantidad era su beneficio personal. Lucas dice que Zaqueo era un hombre rico, por lo que debió de extorsionar mucho a la gente y animó a sus subordinados ahacerlo también.

Jesús pasaba un día por Jericó, pero como Zaqueo era un hombre de baja estatura, no podía ver por encima de la multitud. Corrió hacia delante y se subió a un sicómoro para ver mejor. Para su sorpresa y deleite, Jesús se detuvo, miró hacia arriba y dijo: "Zaqueo, rápido, baja; hoy tengo que ser huésped en tu casa" (Lucas 19:5).

La multitud, sin embargo, murmuró que Jesús estaría socializando con un pecador. Los judíos odiaban a los recaudadores de impuestos porque eran herramientas deshonestas del opresivo gobierno romano. Los santurrones de la multitud criticaron especialmente el interés de Jesús por un hombre como Zaqueo, pero Cristo estaba demostrando su misión de buscar y salvar a los perdidos.

Ante la llamada de Jesús, Zaqueo prometió dar la mitad de su dinero a los pobres y devolver el cuádruple a quien hubiera estafado. Jesús dijo a Zaqueo que aquel día llegaría la salvación a su casa.

En casa de Zaqueo, Jesús contó la parábola de los diez siervos.

Zaqueo no vuelve a ser mencionado en la Biblia después de ese episodio, pero podemos suponer que su espíritu arrepentido y su aceptación de Cristo condujeron, en efecto, a su salvación y a la de toda su familia.

Logros de Zaqueo

Recaudaba impuestos para los romanos, supervisaba las tasas aduaneras en las rutas comerciales a través de Jericó y cobraba impuestos a los ciudadanos de la zona.

Clemente de Alejandría escribió que Zaqueo llegó a ser compañero de Pedro y más tarde obispo de Cesarea, aunque no existe otra documentación fiable que corrobore estas afirmaciones.

Puntos fuertes

Zaqueo debía de ser eficiente, organizado y agresivo en su trabajo.

Zaqueo estaba ansioso por ver a Jesús, lo que sugiere que su interés iba más allá de la mera curiosidad. Dejó atrás todo pensamiento de negocios para subirse a un árbol y echar un vistazo a Jesús. No sería exagerado decir que Zaqueo buscaba la verdad.

Cuando se arrepintió, devolvió el dinero a quienes había engañado.

Puntos débiles

El propio sistema en el que trabajaba Zaqueo fomentaba la corrupción. Debió de encajar bien porque se enriqueció con ello. Engañó a sus conciudadanos, aprovechándose de su impotencia. Probablemente era un hombre solitario, sus únicos amigos habrían sido pecadores o corruptos como él.

Lecciones de vida

Zaqueo es uno de los modelos bíblicos de arrepentimiento. Jesucristo vino a salvar a los pecadores en los días de Zaqueo y todavía hoy. Los que buscan a Jesús, en realidad, son buscados, vistos y salvados por Él. Nadie está más allá de su ayuda. Su amor es una llamada constante a arrepentirse y venir a Él. Aceptar su invitación conduce al perdón de los pecados y a la vida eterna.

Versículos clave de la Biblia

Lucas 19:8

Pero Zaqueo se levantó y dijo al Señor: "Mira, Señor, aquí y ahora doy la mitad de mis bienes a los pobres, y si he estafado a alguien en algo, le devolveré cuatro veces la cantidad".

Lucas 19:9-10

"Hoy ha llegado la salvación a esta casa, porque también éste es hijo de Abrahán. Porque el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que estaba perdido" (NVI).