Historia del culto al Sol en las distintas culturas

En Litha, el solsticio de verano, el sol está en su punto más alto en el cielo. Muchas culturas antiguas marcaron esta fecha como significativa, y el concepto de culto al sol es casi tan antiguo como la humanidad misma. En las sociedades que eran principalmente agrícolas, y dependían del sol para la vida y el sustento, no es de extrañar que el sol se deificó. Mientras que muchas personas hoy en día pueden tomar el día para asar a la parrilla,ir a la playa o broncearse, para nuestros antepasados el solsticio de verano era un momento de gran importancia espiritual.

William Tyler Olcott escribió en Sun Lore de todas las edades, publicado en 1914, que el culto al sol se consideró idolátrico -y, por tanto, algo que debía prohibirse- una vez que el cristianismo se afianzó religiosamente. Dice,

"Nada prueba tanto la antigüedad de la idolatría solar como el cuidado que puso Moisés en prohibirla: "Tened cuidado", dijo a los israelitas, "no sea que cuando levantéis los ojos al cielo y veáis el sol, la luna y todas las estrellas, seáis seducidos y atraídos a rendir culto y adoración a las criaturas que el Señor, vuestro Dios, ha hecho para el servicio de todas las naciones bajo el cielo." Luego tenemos lamención de Josías quitando los caballos que el rey de Judá había dado al sol, y quemando con fuego el carro del sol. Estas referencias concuerdan perfectamente con el reconocimiento en Palmira del Señor Sol, Baal Shemesh, y con la identificación del asirio Bel, y del tirio Baal con el sol".

Egipto y Grecia

Los pueblos egipcios honraban a Ra, el dios del sol. Para la gente del antiguo Egipto, el sol era fuente de vida. Era poder y energía, luz y calor. Era lo que hacía crecer las cosechas en cada estación, por lo que no es de extrañar que el culto a Ra tuviera un inmenso poder y estuviera muy extendido. Ra era el soberano de los cielos. Era el dios del sol, el portador de la luz, y el patrón de los faraones. SegúnEn la leyenda, el sol surca los cielos mientras Ra conduce su carro por los cielos. Aunque en un principio sólo se le asociaba con el sol del mediodía, con el paso del tiempo Ra pasó a estar vinculado a la presencia del sol durante todo el día.

Los griegos honraban a Helios, similar a Ra en muchos aspectos. Homero describe a Helios como "el que da luz tanto a los dioses como a los hombres". El culto a Helios se celebraba cada año con un impresionante ritual que incluía un carro gigante tirado por caballos desde el extremo de un acantilado hasta el mar.

Tradiciones nativas americanas

En muchas culturas nativas americanas, como los iroqueses y los pueblos de las llanuras, el sol era reconocido como una fuerza que da vida. Muchas de las tribus de las llanuras todavía celebran cada año la Danza del Sol, que se considera una renovación del vínculo que el hombre tiene con la vida, la tierra y la estación de crecimiento. En las culturas mesoamericanas, el sol se asociaba con la realeza, y muchos gobernantes reivindicaban derechos divinos a través de su autoridad directa sobre la tierra.descendencia del sol.

Persia, Oriente Próximo y Asia

Como parte del culto a Mitra, las sociedades persas primitivas celebraban la salida del sol cada día. La leyenda de Mitra bien pudo haber dado origen a la historia cristiana de la resurrección. Honrar al sol era una parte integral del ritual y la ceremonia en el mitraísmo, al menos hasta donde los estudiosos han podido determinar. Uno de los rangos más altos que se podía alcanzar en un templo mitraísta era el de heliodromus o portador del sol.

En la actualidad, muchos paganos rinden homenaje al sol en el solsticio de verano, y éste sigue brillando con su ardiente energía sobre nosotros, aportando luz y calor a la tierra.

Honrar al Sol hoy

¿Cómo puedes celebrar el sol como parte de tu propia espiritualidad? No es difícil; al fin y al cabo, el sol está ahí fuera casi todo el tiempo. Prueba algunas de estas ideas e incorpora el sol a tus rituales y celebraciones.

Utiliza una vela amarilla o naranja brillante para representar al sol en tu altar y cuelga símbolos solares por toda la casa. Coloca atrapasoles en las ventanas para llevar la luz al interior. Carga un poco de agua para uso ritual colocándola en el exterior en un día soleado. Por último, considera la posibilidad de empezar cada día ofreciendo una plegaria al sol naciente y terminar la jornada con otra cuando se ponga.