Maldiciones

Una maldición es lo contrario de una bendición: mientras que una bendición es un pronunciamiento de buena fortuna porque uno se inicia en los planes de Dios, una maldición es un pronunciamiento de mala fortuna porque uno se opone a los planes de Dios. Dios puede maldecir a una persona o a toda una nación por su oposición a la voluntad de Dios. Un sacerdote puede maldecir a alguien por violar las leyes de Dios. En general, las mismas personas con autoridad parabendecir también tiene autoridad para maldecir.

Tipos de maldiciones

En la Biblia, tres palabras hebreas diferentes se traducen como "maldición". La más común es una formulación ritual que describe como "malditos" a aquellos que violan las normas comunitarias definidas por Dios y la tradición. Algo menos común es una palabra utilizada para invocar el mal contra cualquiera que viole un contrato o un juramento. Por último, hay maldiciones que se invocan simplemente para desear el mal a alguien, como maldecir aun vecino en una discusión.

Objetivo

Las maldiciones se encuentran en la mayoría de las tradiciones religiosas del mundo, si no en todas. Aunque el contenido de estas maldiciones puede variar, el propósito de las maldiciones parece ser notablemente coherente: aplicación de la ley, afirmación de la ortodoxia doctrinal, garantía de estabilidad de la comunidad, acoso a los enemigos, enseñanza moral, protección de lugares u objetos sagrados, etc.

Como acto de habla

Una maldición comunica información, por ejemplo sobre el estatus social o religioso de una persona, pero lo más importante es que es un "acto de habla", lo que significa que realiza una función. Cuando un ministro dice a una pareja: "Yo os declaro marido y mujer", no sólo está comunicando algo, sino que está cambiando el estatus social de las personas que tiene delante. Del mismo modo, una maldición es un acto que requiere unfigura autorizada que realiza el acto y aceptación de esta autoridad por quienes lo escuchan.

Maldición y cristianismo

Aunque el término no se utiliza generalmente en el contexto cristiano, el concepto desempeña un papel central en la teología cristiana. Según la tradición judía, Adán y Eva fueron maldecidos por Dios por su desobediencia. Toda la humanidad, según la tradición cristiana, está maldita por el pecado original. Jesús, a su vez, asume esta maldición para redimir a la humanidad.

Como signo de debilidad

Una "maldición" no es algo emitido por alguien con poder militar, político o físico sobre la persona a la que se maldice. Alguien con ese tipo de poder casi siempre lo utilizará cuando busque mantener el orden o castigar. Las maldiciones son utilizadas por aquellos sin un poder social significativo o que simplemente carecen de poder sobre aquellos a los que desean maldecir (como un enemigo militar más fuerte).